cotidianidades

Locuras, miniaturas, envolturas, souvenirs y desastres varios.

20 agosto 2008

A veces es mejor cuando no ocurre

La vida puede ser jodidamente desconcertante a veces.
Un día sales de fiesta con tus amigos, es un día normal, un viernes cualquiera, en el mismo bar de siempre, discutís sobre gilipolleces: “el disco que me pasaste me parece una mierda” o “la crisis va a acabar con todos nosotros” o “me debes pasta de aquella vez”. Gilipolleces intrascendentes pero con cierta importancia inmediata. Miras al tío con el que tienes algo pendiente. Te tomas una copa a su salud. Recibes alguna buena noticia. Nada que te lleve a pensar que algo vaya a cambiar.
Pero, como ya he dicho, la vida puede ser desconcertante.
Y es entonces-cuando apareces tú-así-como sin quererlo-me dedicas una sonrisa-me invitas a un café-te doy mi número de teléfono.
Y de repente todo se complica: ¿y ahora qué?
Estás en casa haciendo el vago. Pones la tele, preparas café. Te lías un mai aún sabiendo que no deberías. Miras la hora: las 12. Alguien discute a lo lejos. El teléfono suena, la canción de siempre. Impertinente… y no se calla. Eres tú. ¡Eres tú! Intentas no darle vueltas pero tu cabeza va por libre.
Dices cosas bonitas-no te creo-jugamos-a ver quién puede más-lo dejamos en tablas-ya hablaremos del tema.
Y de repente, casi como sin quererlo, los días siguientes se convierten en una vorágine de sentimientos, recuerdos, miedos. La felicidad planea sobre tu cabeza en forma de mensaje de texto. La escala de valores en la que creías a pies juntillas se tambalea peligrosamente. A tu alrededor las cosas adquieren un aura diferente, la gente es más amable, los colores son más vivos. Y todo asusta un poco más. Lo importante es tener salud.
Pero las cosas se tuercen-tú confiesas un secreto-yo empiezo a desconfiar-pienso: respira. Coge aire.
Entonces empiezas a dejar que las cosas pasen, a pasar por las cosas. Te acuerdas de que hay discos que nunca descifrarás y otros que mueren repentinamente. Que hay canciones que siempre van a estar ahí, pase lo que pase, estarán ahí. Que inextirpable sigue siendo tu palabra favorita. Y que a veces viene bien citar a Warhol:”a veces es mejor cuando no ocurre”. A veces.

7 Comments:

Blogger Txe Peligro said...

es inexplicable que sea inextirpable.

weah!

20 agosto, 2008 20:48  
Blogger Juanjo Ruiz Navarro said...

si el mio es cjonudo ...entonces este...brillante diría yo..mi gato Jazz tb lo piensa.
gato jazz: MIAU MSIAU ...

Me encanta como concluye.

Lo más excitante de las cosas es no hacerlas, si te enamoras de alguien , no lo hagas nunca, es mucho más excitante.

A.W.

21 agosto, 2008 01:36  
Blogger el loco oficial said...

te echaba de menos.... :)

21 agosto, 2008 10:37  
Blogger pez said...

Hay que ver los efectos tan raros que tiene uno por culpa de una copa.

22 agosto, 2008 13:07  
Blogger dEsoRdeN said...

...pero peor es quedarte con la duda de si debió ocurrir algo que al final nunca pasó...
ptns

23 agosto, 2008 02:46  
Blogger Bambu said...

Qué peligro tiene enamorarse... y qué miedo da.
Lo has explicado tal cual, yo me uno a tu sensación ;-)

04 septiembre, 2008 15:27  
Blogger Beatrix Kidoo said...

txe, inextirpable mola un güevo... a ver, dime una palabra mejor??!

juanjo, oye, que joya de gato! hazle un mimico de mi parte, anda.

Loco oficial, gracias.

Pez, eso es sin beber. Imagínate en estados alterados lo que soy capaz de hacer.

desorden, tienes razón, joder!

bambú, y lo que me he deajado! lágrimas, despedidas, reencuentros, reconciliaciones, putadas varias, insomnio, etc...

besus a todos y gracias!

04 septiembre, 2008 19:42  

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